miércoles, 7 de junio de 2017
Conceden medalla de oro a la Virgen del Rosario
Quien ha confundido churras con merinas, medallas honoríficas con asuntos de fe y política con religión no ha sido ahora un cargo público del PP o del PSOE, sino Kichi, el alcalde de Cádiz (Por Cádiz Sí Se Puede, de Podemos). Pablo Iglesias ha justificado el evento con estas palabras: "Yo creo que Kichi lo ha manejado de una manera muy laica, en el sentido de que se trata de una muestra de respeto a los sentimientos populares"; y ha añadido: "Los urbanitas de izquierdas tenemos que aprender a respetar esas tradiciones tan arraigadas en el pueblo".
Causa asombro y sonrojo comprobar el poco tiempo que han necesitado para adoptar las maneras de la vieja política, la casta. Detrás de esta condecoración mariana no veo nada de respeto ni de laicidad, sino puro cálculo electoral y, ahora sí, pura demagogia populista, tanto en lo que hace uno como en lo que dice el otro.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario